En adelante,
...
tal vez ni siquiera nos esperen ya
días malos ni buenos a secas;
tan solo, buenimalos-malibuenos.
A saber: buenos en lo malo,
malos en lo bueno.
Un par de futuros de a peseta.
...
...
.
.
Hermosa vida que pasó y parece
ya no pasar…
Desde este instante, ahondo
sueños en la memoria: se estremece
la eternidad del tiempo allá en el fondo.
Y de repente un remolino crece
que me arrastra sorbido hacia un trasfondo
de sima, donde va, precipitado,
para siempre sumiéndose el pasado.
Jaime Gil de Biedma, "Recuerda"
Gemma, se nos han perdido los escalones. No sabemos si subir o bajar.
ResponderEliminarCreo que desde los tiempos de cazador recolector, tengo el miedo en mis ojos.
Abrazo al acecho.
Lo sé, Gemma, vengo cargando con estos dos futuros desde hace tanto tiempo que ya no reniego, es más, me he amigado con ellos.
ResponderEliminarAunque comento poco, casi nada, siempre visito tu página y me llevo tus entradas a mi twitter. Espero no te moleste. Un fortísimo abrazo.
Desolador. Y sin embargo, algo bueno podemos encontrar entre lo malo.
ResponderEliminarAbrazos buenísimos.
Gracias a los tres por pasaros y comentar. Abrazos fuertes
ResponderEliminarComparto los miedos y me asusto por los jóvenes.
ResponderEliminarGenia.