..
..
.
Ante la languidez extrema de mi ensueño, el micro ha huido despavorido.
..
II.
Ante la persistencia de mi lánguido sueño, el micro ha huido despavorido.
..
III.
Ante la insistencia de mi sueño ingrávido, el micro se ha volatilizado.
...
.
.
Hermosa vida que pasó y parece
ya no pasar…
Desde este instante, ahondo
sueños en la memoria: se estremece
la eternidad del tiempo allá en el fondo.
Y de repente un remolino crece
que me arrastra sorbido hacia un trasfondo
de sima, donde va, precipitado,
para siempre sumiéndose el pasado.
Jaime Gil de Biedma, "Recuerda"