martes, 13 de noviembre de 2018

Todas las esquinas

Esta sola imagen también eres tú:

con su visión de las cosas más pequeñas;

el deseo de equilibrio, personal y colectivo,

o tu natural aquiescencia cuando todo 

yace en calma, sin atributos ni disensiones vanas;

a fin de cuentas, esta imagen sola también fuiste tú:

con esas ansias de libertad que surcaban horizontes,

y esa claridad de líneas y colores planos, 

o la ausencia casi total de perspectiva

si no fuera porque el sol nos asombra siempre

hasta vaciarnos de aristas;

de igual modo, algún día, esta imagen solitaria también serás tú:

y ese banco que ves ahora permanece a la espera

de que sigas volviendo mañana y pasado mañana,

a las horas convenidas, para que el sol siga cayendo de plano a plomo,

alumbrando con sus rayos plomizos todas las esquinas.



.
.
Hermosa vida que pasó y parece
ya no pasar…
Desde este instante, ahondo
sueños en la memoria: se estremece
la eternidad del tiempo allá en el fondo.
Y de repente un remolino crece
que me arrastra sorbido hacia un trasfondo
de sima, donde va, precipitado,
para siempre sumiéndose el pasado.


Jaime Gil de Biedma, "Recuerda"