Mientras por fuera el tiempo laceraba su cuerpo entero, volviéndolo más torpe y frágil; por dentro, el termitero incansable de los años roía, aplicado, todos sus anhelos y recuerdos, tornándolos no menos impenetrables, recónditos.
Quizá lo hermoso y la vez dramático sea la soledad que provoca la incomunicación de las experiencias únicas y personales.Ahí están las artes para sobreponernos.Me gusta también muchísimo la imagen que has puesto,¿ de quién es?.Un abrazo.
Qué lindo, Mega!. Resume el instante de lo que, con ese paso constante, lacerado y fijado en el Ubi sunt, a ciertas edades, ya inciertas, volvemos. Ni añado, ni te digo màs. Tan solo, darte las gracias, por este pensar, fràgil y tan torpe ,como lo es de por sî, un recuerdo añorado, tras la fragilidad del tiempo que nos carcome como el roîn, sin darnos tregua...
Me ocurre cada día más con tus textos que no encuentro expresiones posteriores para volcarlas aquí y que puedan expresar algo con cierto sentido. Con la poesía me sucede lo mismo, ya lo he comentado en más de una ocasión.
El texto tuyo de hoy me parece sencillamente maravilloso.
Sigma, la foto la sacó mi sobrino de 7 años a su hermano de 4, mientras hacían el tonto... Me gustó porque a mí me servía para representar las dentelladas, los bocados, que suele dar el maldito tiempo, tan feroz y voraz. Besazo
Eva, el tiempo corroe por dentro lo mismo que por fuera. Aunque parezca una crueldad, está bien que así sea. Otro beso de vuelta
Manuel, gracias, querido. Eso que dices me ha parecido muy bonito.
Nán, jaja, lo tendré en cuenta, descuida. Beso
Freia, besazo de vuelta entonces. Todavía me acuerdo (no hace tanto) de cuando tenía sólo dos lectores comentaristas: tú y Nán. (Para mí es una verdadera alegría poder teneros aún por aquí.)
Izaskun, muchísimas gracias; me anima mucho que os convenza. Beso
Lara, y qué bien que te haya gustado. Siempre me alegran tus palabras. Besos
Mega, este tu sueño de memoria ha sido asertivo. El derrumbe tine que ser total; forma y contenido. Imagínate; si queda el cuerpo sin memoria un vegetal doloroso y si queda la memoria sin cuerpo un dolor inexpresable. Un abrazo sin tiempo. Sergio Astorga
. . Hermosa vida que pasó y parece ya no pasar… Desde este instante, ahondo sueños en la memoria: se estremece la eternidad del tiempo allá en el fondo. Y de repente un remolino crece que me arrastra sorbido hacia un trasfondo de sima, donde va, precipitado, para siempre sumiéndose el pasado.
Quizá lo hermoso y la vez dramático sea la soledad que provoca la incomunicación de las experiencias únicas y personales.Ahí están las artes para sobreponernos.Me gusta también muchísimo la imagen que has puesto,¿ de quién es?.Un abrazo.
ResponderEliminarQué lindo, Mega!. Resume el instante de lo que, con ese paso constante, lacerado y fijado en el Ubi sunt, a ciertas edades, ya inciertas, volvemos.
ResponderEliminarNi añado, ni te digo màs. Tan solo, darte las gracias, por este pensar, fràgil y tan torpe ,como lo es de por sî, un recuerdo añorado, tras la fragilidad del tiempo que nos carcome como el roîn, sin darnos tregua...
Besines, corazôn.
Me ocurre cada día más con tus textos que no encuentro expresiones posteriores para volcarlas aquí y que puedan expresar algo con cierto sentido. Con la poesía me sucede lo mismo, ya lo he comentado en más de una ocasión.
ResponderEliminarEl texto tuyo de hoy me parece sencillamente maravilloso.
Ah, no, pero para eso estáis los que escribís. Para que no nos cubra el piadoso manto de la impenetrabilidad.
ResponderEliminar¡Para una sola vez que vivimos!
Pues me adhiero a lo que dice Manuel.
ResponderEliminarSi sigues escribiendo así te vas a quedar sin comentaristas, que no sin lectores.
Un besazo
Erre que erre vuelvoo a Manuel y a Freia. Qué bellísima manera de expresar.
ResponderEliminarUn beso
chillido cósmico, y cómo tan íntimo
ResponderEliminargenial
Sigma, la foto la sacó mi sobrino de 7 años a su hermano de 4, mientras hacían el tonto... Me gustó porque a mí me servía para representar las dentelladas, los bocados, que suele dar el maldito tiempo, tan feroz y voraz. Besazo
ResponderEliminarEva, el tiempo corroe por dentro lo mismo que por fuera. Aunque parezca una crueldad, está bien que así sea. Otro beso de vuelta
Manuel, gracias, querido. Eso que dices me ha parecido muy bonito.
Nán, jaja, lo tendré en cuenta, descuida. Beso
Freia, besazo de vuelta entonces. Todavía me acuerdo (no hace tanto) de cuando tenía sólo dos lectores comentaristas: tú y Nán. (Para mí es una verdadera alegría poder teneros aún por aquí.)
Izaskun, muchísimas gracias; me anima mucho que os convenza. Beso
Lara, y qué bien que te haya gustado. Siempre me alegran tus palabras. Besos
Mega, este tu sueño de memoria ha sido asertivo.
ResponderEliminarEl derrumbe tine que ser total; forma y contenido.
Imagínate; si queda el cuerpo sin memoria un vegetal doloroso y si queda la memoria sin cuerpo un dolor inexpresable.
Un abrazo sin tiempo.
Sergio Astorga
Sergio, eso mismo pienso yo. En suma, es una suerte que nuestro interior y exterior siga un curso paralelo. Besos
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