martes, 8 de enero de 2008

Luminosa oscuridad

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La tarde declina. Cree que si se queda un rato más, empezará a sentir frío, de tanto silencio como se escucha. Al fin se decide y extrae del bolso, medio a tientas, una cámara de fotos diminuta. El sol se va perdiendo por los surcos de la noche hasta que los árboles detienen su sombra. A estas horas, sólo pasean ya algunos turistas. Quisiera enfocar la cámara para perseguir la luz en movimiento. Saca varias fotos; se abriga. Cuando recoja sus pasos, será noche oscura.

10 comentarios:

  1. Cuando estamos en el parque con los niños y se pone el sol, Tomás siempre va a gritos "el sol, el sol!!!"...
    Los niños tienen un sentido especial para ver (aún) estas maravillas de la naturaleza.

    Besotes

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  2. "El sol se va perdiendo por los surcos de la noche hasta que los árboles detienen su sombra".
    Esta frase es un pequeño milagro.

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  3. A mí me gusta pensar que la luz que el sol emite tarda ocho minutos en llegar a nosotros; que, cuando vemos ponerse el sol, lo que vemos pasó hace ocho minutos.

    También me gusta pensar que sin el sol, todo sería frío y oscuridad.

    Una vez le dije a una niña: "Nosotros necesitamos al sol para existir. En cambio, él no nos necesita para nada". Y ella contestó "Sí que nos necesita: para servir para algo".

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  4. ¡Esa niña, Saiz, era la encarnación de Saint Exupery!

    (o una principessa)

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  5. Querida, estoy flipando con tu blog. Me has abierto un mundo nuevo hoy - muchissimas gracias

    besos G.

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  6. Maripuchi, los niños son perceptivos a tope, se muestran abiertos (y vigilantes) ante el mundo como a ninguna otra edad. Son los verdaderos exploradores del universo.

    Herman, ¡qué amable eres! También a mí me gusta pensar que la literatura puede llegar a ser reveladora.

    Saiz, ¡qué bueno sería que pudieras seguirle la pista a esta niña sabia, y tenernos informados de cada uno de sus hallazgos!

    Nán, ya veo que estás al pie del cañón... ;-)

    Anónimo, que "hayas flipado" me ha dado una cierta idea de tu posible identidad. Me alegro mucho de que sea así. Gracias G.

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  7. Preciosa entrada.

    Me gustas más cuando describes. Creo que es tu punto fuerte.

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  8. Pues muchísimas gracias, Leg. En adelante, me esmeraré en ello. ;-)

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  9. "El sol se va perdiendo por los surcos de la noche hasta que los árboles detienen su sombra" ¡Hale, así, a bocajarro, sin más, sin anestesia!
    Ya, ya sé que Herman lo ha dicho antes, pero es tengo tantas cosas que hacer y tan poco tiempo para todas que últimamente (ya lo he dicho en otro blog) me parezco al conejo de Alicia: siempre corriendo y siempre tarde.

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Hermosa vida que pasó y parece
ya no pasar…
Desde este instante, ahondo
sueños en la memoria: se estremece
la eternidad del tiempo allá en el fondo.
Y de repente un remolino crece
que me arrastra sorbido hacia un trasfondo
de sima, donde va, precipitado,
para siempre sumiéndose el pasado.


Jaime Gil de Biedma, "Recuerda"