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La tarde declina. Cree que si se queda un rato más, empezará a sentir frío, de tanto silencio como se escucha. Al fin se decide y extrae del bolso, medio a tientas, una cámara de fotos diminuta. El sol se va perdiendo por los surcos de la noche hasta que los árboles detienen su sombra. A estas horas, sólo pasean ya algunos turistas. Quisiera enfocar la cámara para perseguir la luz en movimiento. Saca varias fotos; se abriga. Cuando recoja sus pasos, será noche oscura.
Cuando estamos en el parque con los niños y se pone el sol, Tomás siempre va a gritos "el sol, el sol!!!"...
ResponderEliminarLos niños tienen un sentido especial para ver (aún) estas maravillas de la naturaleza.
Besotes
"El sol se va perdiendo por los surcos de la noche hasta que los árboles detienen su sombra".
ResponderEliminarEsta frase es un pequeño milagro.
A mí me gusta pensar que la luz que el sol emite tarda ocho minutos en llegar a nosotros; que, cuando vemos ponerse el sol, lo que vemos pasó hace ocho minutos.
ResponderEliminarTambién me gusta pensar que sin el sol, todo sería frío y oscuridad.
Una vez le dije a una niña: "Nosotros necesitamos al sol para existir. En cambio, él no nos necesita para nada". Y ella contestó "Sí que nos necesita: para servir para algo".
¡Esa niña, Saiz, era la encarnación de Saint Exupery!
ResponderEliminar(o una principessa)
Una puer senex, sin duda.
ResponderEliminar;-)
Querida, estoy flipando con tu blog. Me has abierto un mundo nuevo hoy - muchissimas gracias
ResponderEliminarbesos G.
Maripuchi, los niños son perceptivos a tope, se muestran abiertos (y vigilantes) ante el mundo como a ninguna otra edad. Son los verdaderos exploradores del universo.
ResponderEliminarHerman, ¡qué amable eres! También a mí me gusta pensar que la literatura puede llegar a ser reveladora.
Saiz, ¡qué bueno sería que pudieras seguirle la pista a esta niña sabia, y tenernos informados de cada uno de sus hallazgos!
Nán, ya veo que estás al pie del cañón... ;-)
Anónimo, que "hayas flipado" me ha dado una cierta idea de tu posible identidad. Me alegro mucho de que sea así. Gracias G.
Preciosa entrada.
ResponderEliminarMe gustas más cuando describes. Creo que es tu punto fuerte.
Pues muchísimas gracias, Leg. En adelante, me esmeraré en ello. ;-)
ResponderEliminar"El sol se va perdiendo por los surcos de la noche hasta que los árboles detienen su sombra" ¡Hale, así, a bocajarro, sin más, sin anestesia!
ResponderEliminarYa, ya sé que Herman lo ha dicho antes, pero es tengo tantas cosas que hacer y tan poco tiempo para todas que últimamente (ya lo he dicho en otro blog) me parezco al conejo de Alicia: siempre corriendo y siempre tarde.