viernes, 16 de agosto de 2019

En La libélula, de rne

Ayer a media noche, me encontré esta bellísima sorpresa en el enlace que sigue (rtve.es/lalibelula), con motivo de la aparición del monográfico dedicado al automóvil de la revista LITORAL, donde podréis escuchar el programa entero
En el podcast en cuestión, se reproducen piezas de Rogelio Guedea, Carlos Orellanauna servidora y Juan Carlos Mestre, en este mismo orden.
Mi agradecimiento a Juan Suárez Barquero y a la revista LITORAL por su lectura y publicación.
El microrrelato escogido pertenece a Maleza viva (Jekyll & Jill, Zaragoza, 2016).

Principio de contradicción
Un hombre sabe que ama a una mujer pero se siente incapaz de declarársele. Esa mujer desafortunada lleva largo tiempo infeliz, aun cuando ella lo atribuya a que no consigue aprobar su carné de conducir, que se ha empeñado en sacar enseguida, más allá de que sienta pavor, y hasta un indudable rechazo, por los coches que circulan impasibles día y noche por delante de su casa. El hombre que ama y desama a la mujer que desea y rechaza el carné de conducir lleva enamorado más de siete meses, sumido en las delicias de su tortura, aunque esta misma mañana ha decidido ponerle fin, no sabemos todavía si a su amor o a su tormento. En cuanto la vea salir del edificio, piensa invitarla a dar un paseo en coche. Hace tan sólo veinte minutos que espera y desespera aparcado frente a su puerta.





Os copio el texto con toda la información del programa procedente de Facebook.


La Libélula
Antes que nada quiero agradeceros a todos las múltiples felicitaciones por mi reciente cumpleaños. Me hacéis sonrojar, y sentir apreciado, cosa poco frecuente. Os lo agradezco de veras. Y bueno, ya que estoy, quiero también agradecer a a La Libélula de Radio 3 la posibilidad que me da de aprovechar este puente haciendo una de las cosas que más me gustan: conducir mientras suena la radio… La verdad es que me encanta (al menos en mi imaginación, ya que no tengo ni carnet). Por suerte, últimamente lo puedo hacer en compañía de esta pequeña anisóptera gracias al número #267 de Litoral. Revista de la Poesía, el Arte y el Pensamiento. Ya hemos subido en este volumen un par de veces, y hoy lo aparcaremos, aunque antes disfrutaremos de algunos de los textos y poemas que incluye y que firman Rogelio Guedea, Carlos Orellana, Gemma Pellicer y nuestro querido Juan Carlos Mestre. Todo en las voces de Juan Suárez Barquero. Como música rutera, o casi, #DJπTitoha elegido canciones y composiciones de los POET IN PROCESS (Oficial)TULSA (OFICIAL)Canned Heat, The Farangs, Lhasa De SelaLaurie JohnsonThe Beatles vía Black Heat, Thomas Montgomery Newman y Dusminguet.





Estas son las canciones-artistas-álbumes que sonarán esta noche:
Driving in my car - Poet in process - Long time to see
Carretera - Tulsa - Solo me has rozado
On the road again - Canned Heat - 100 % Rolling Stone 
Vormelit car race - The farangs - We must be losing it
Anywhere on This Road - Lhasa - The Living Road
Chase that car - Laurie Johnson - Music For TV Dinners
Drive My Car - Black Heat - Glass Onion. Songs of the Beatles
Desert Drive - Thomas Newman - The Player [Original Score]
Carretera del miedo - Dusminguet - Postrof
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Recuerda que nos puedes escuchar como #Podcast y #Ficciones sueltas en rtve.es/lalibelula.
También tienes los #audiolibros de #LiterCast disponibles para escuchar, descargar y compartir en RNE sólo en podcast.
Y además hay vídeos en torno a la Literatura en Palabra Voyeur, sólo en Radio 3 Extra. ¡Mira cómo suenan!

jueves, 15 de agosto de 2019

798

Tejer: tramar entre sí una urdimbre de hilos para que de ahí salga algo bello y, por consiguiente, con sentido. Actividad denostada por Penélope, mientras que Ariadna prefería deshacer ovillos. También cabe considerar dicha acción como una muestra de afecto habitual por parte de las abuelas a sus nietos. Y, por qué no, de algún que otro abuelo, tío segundo e incluso tía abuela. Construir y edificar en sentido figurado.



miércoles, 14 de agosto de 2019

797

A los malos políticos no les preocupa la realidad en sí misma, sino sostener como sea su apariencia de realidad.




martes, 13 de agosto de 2019

796

Tenía un don especial para el desacierto. A decir verdad, sólo cuando se equivocaba, acertaba.



lunes, 12 de agosto de 2019

795

Al cumplirse, los tópicos se vuelven más tópicos. Y más tóxicos también.



794

Techumbre: amasijo de estructuras que remata un edificio y lo completa. Amparo celeste y terrestre. Punta o extremo que si bien puede adornar, corona, protege y salvaguarda. 



viernes, 9 de agosto de 2019

793

Desaparecer. Esfumarse. Acaso difuminarse lo propio para que solo quede nuestra ausencia de sombra y asombro.




lunes, 5 de agosto de 2019

domingo, 4 de agosto de 2019

791

Se impacienta todo aquel que no tiene aguante ni pretende tenerlo por la cuenta que le trae, que es impacientarse de forma manifiesta (pero también notoria) ante cualquier circunstancia que se precie, abocado como está al estallido y a soltar impertinencias bochornosas, sin matices ni templanzas que valgan, sobre todo en verano, cuando la capacidad de resistencia se halla bajo mínimos, valga la paradoja, mientras los individuos más pacientes asisten a semejante espectáculo sin sobreponerse apenas a su asombro, ni tampoco al asombro ajeno, esa es la verdad, replicándose ambos asombros —el propio y el ajeno— en una especie de continuidad sin fin que, por extraño que parezca, termina por impacientar más si cabe al impaciente de turno del principio, y así hasta la exasperación.


viernes, 2 de agosto de 2019

790

Ala: apéndice que las aves más suertudas emplean para mantenerse en las nubes el tiempo suficiente a fin de olvidar su existencia terrena. Por lo mismo, tenerlas implica la asunción de determinada gloria o fortuna, más allá del empuje hacia arriba o de la ascensión que resulte de coger velocidad, con vistas a planear en el aire un tiempo incierto a partir de la confluencia de una serie de ejercicios aerostáticos, aerodinámicos y aeróbicos, combinados en diversa proporción. Otrosí: aliento, ánimo, brío, valor, impulso vital.




martes, 30 de julio de 2019

789

Puerta: vano que da pie a la esperanza o al desvelo por igual, según el temperamento de quien lo use. Arco de triunfo doméstico. Salida y entrada simultánea; en ocasiones, umbral. Vía de comunicación entre dos áreas supuestamente independientes. Otras veces, posibilidad de escapatoria o, cuando menos, antítesis de cualquier redil.


domingo, 21 de julio de 2019

viernes, 19 de julio de 2019

miércoles, 17 de julio de 2019

786

Despertar: decidir cada mañana a qué estás dispuesto. 
Y en qué medida.





martes, 9 de julio de 2019

785


El aforista es un ser lacónico por definición. 
Presumiblemente.


784

Al decir del DRAE, bien pudiera ser que el aforista fuera un hombre poco o nada versado en el estudio de los fueros.

forista

1. m. desus. Hombre versado en el estudio de los fueros.

lunes, 8 de julio de 2019

783

Aire acondicionado: sistema artificial que se empeña en refrescarnos en exceso y de forma deficiente al mismo tiempo. Causa de malestar interno hasta el deseo de gritar basta. Trasto que no cumple ni por asomo con la función prescrita. Maquinaria infame en cualesquiera de los casos. Motivo de discordia. Alivio o condena. Instrumento que hace las delicias de toda dictadura, ya sea por acción, ya por omisión.



viernes, 5 de julio de 2019

PS...

La elipsis, hambrienta y voraz, despiadada como ella sola, se está comiendo sin miramientos este exiguo microrrel...

La elipsis se está comiendo —a trompicones— este exiguo microrrel...

La elipsis se está comiendo.

LA ELIPS...




martes, 2 de julio de 2019

Veintidós grados,

y por la calle la gente respira, sonríe, mira, dice. La gloria son 22 grados a la sombra o al sol, tanto da. A lo largo de esta mañana he logrado hacer de un plumazo lo que durante los dos días previos: desayunar, trabajar, comer y dormir. Todo concentrado en un día de escasas horas a 22 grados templados. Ni uno más. Porque la felicidad era llevar calcetines en verano. Poder planchar al fin toda la tarde sin pausa. Merendar de nuevo y olvidarse para siempre de los 38 grados que, justo ayer, martilleaban ufanos su maldito calor. Pura redención.

viernes, 28 de junio de 2019

782

Aprensión: desconfianza ante lo que pueda venir o acaecer. Sospecha (in)fundada. Recelo que muta en agobio. Angustia leve. Temor difuso.




lunes, 24 de junio de 2019

781

El aforismo es la conciencia del ser; el microrrelato, la expresión del ser.



domingo, 23 de junio de 2019

780

Amor: ansiedad del ánimo y del cuerpo. Dolor crónico más o menos llevadero. Deseo que trepa como una enredadera. Plenitud esquiva.


sábado, 22 de junio de 2019

jueves, 20 de junio de 2019

778


Débito: acumulación de deudas que se superponen en el tiempo hasta cuestionar la propia supervivencia, y que resultan en un lastre mayúsculo, insondable, imposible de satisfacer. Cantidad que se deja a pagar de por vida y, a menudo, de por muerte. Condición de quien tiene cierta vocación vergonzante de deudor y por ello se debate irremisiblemente entre deudos y adeudos.





lunes, 17 de junio de 2019

777

Simulacro:  representación que alguien (generalmente, un iluminado, un gracioso con visos autoritarios, o un desalmado simplón) decide organizar conforme a la existencia de unas circunstancias, y la participación inconsciente de unos personajes que no saben que lo son. Delirio. Broma de mal gusto. Canallada ejemplarizante. 




jueves, 13 de junio de 2019

miércoles, 12 de junio de 2019

775

Temeridad: acción, calidad de una obra o juicio propios de quien se sabe lanzado a cumplir sus designios, buscando satisfacerlos más allá de la naturaleza o fundamento de los mismos; fuera de toda razón y conveniencia. De ahí que sean tachados de imprudentes o precipitados. En otras latitudes, razón de ser. Sal de la vida. 


domingo, 9 de junio de 2019

773


Se demora todo aquel (o aquello) que decide, por su cuenta y riesgo, detenerse en alguien (o algo) de improviso, a sabiendas de que su actuación causará impaciencia, o será recibida con fastidio e incordio, cuando no con irritación manifiesta. De ahí que el sujeto (u objeto) demorador o demorante sea, en general, un idealista (o un ideal), un soñador irredento (o un ensueño). A veces, también, un perfecto tocapelotas.


viernes, 7 de junio de 2019

Revista LITORAL, núm. 267

Muy agradecida a Antonio Lafarque y Lorenzo Saval por encontrarme con el microrrelato "Principio de contradicción" en feliz compaña entre tan bellas páginas de poesía, arte y pensamiento de la Revista Litoral, cuyo último número dedica por extenso al automóvil y a rendir homenaje a FGL.



Aquí, los dos índices del número 267:




lunes, 3 de junio de 2019

Berlín, 34 grados

Niños como lagartijas corretean por la calle, gritando y escabulléndose sin importarles nada más que su propio juego, al que se entregan con absoluta seriedad. Las golondrinas chillan y los coches pasan mientras los adultos sestean o, al menos, lo intentan. La tarde parece que transcurra a ratos. Quién sabe. A lo mejor, lo hace.


sábado, 1 de junio de 2019

772

Oquedad: hueco que deja un vacío. O vacío que deja un hueco. Como sucede en el vaciado de un molde, quedando este, por extraño que parezca, ahuecado a perpetuidad. Acaso una muestra de puro orgullo. O como cuando alguien ahueca el ala. Y echa a volar sin saber hasta cuándo, ni en qué dirección es mejor tirar, pues ignora por dónde sopla el viento; ese mismo que nos sostiene cuando decide sostenernos. Como seres de aire que somos. Un comportamiento semejante.



viernes, 31 de mayo de 2019

jueves, 30 de mayo de 2019

Juan Vico, El animal más triste


La verdadera ficción


En Los bosques imantados, la anterior novela del autor, el protagonista se empeñaba en deslindar las falsas creencias de la pura realidad objetiva, un empeño que trataba de conseguir por medio de su labor detectivesca en un entorno rural donde la verdad apenas sí parecía interesar a nadie frente a la más poderosa superchería y autosugestión de la gente. En El animal más triste, por el contrario, ya no se trata tanto de contrastar la realidad con leyendas o ficciones cercanas al mito, sino de cotejarla más bien con los deseos, anhelos y sueños de un grupo de amigos que acaban de ingresar en la madurez. 

Vico pone el acento en la realidad a menudo amarga ─o, cuando menos, agridulce─ de un puñado de amigos cuarentones que se reúnen con sus parejas en una casa rural tras veinte años de amistad, un motivo habitual en la literatura, lo que da pie a un ajuste de cuentas personal y colectivo que se va desplegando en la primera y tercera parte de la novela, mientras hablan entre sí o incluso monologan, tal y como ocurre en el teatro de, por ejemplo, Thomas Bernhard, o en las películas de Éric Rohmer y Woody Allen, tras ver rebajados o defraudados sus afanes de juventud. Si exceptuamos la segunda parte, no se trata de una narración en la que ocurran cosas sino, más bien, de una novela en la que prevalece el diálogo. De ahí la sensación acuciante de hallarnos ante un examen de conciencia que corre a cargo de cada uno de los personajes, quienes toman la palabra como narradores para justificar sus decisiones vitales.


Pero esta novela polifónica es también un homenaje al buen cine. No en vano, son múltiples las referencias a directores y películas que se utilizan como término de comparación para justificarse o, incluso, transigir ante un destino que no se revela tan fantástico como soñaban. Tampoco falta en la segunda parte un cuento melodramático intercalado que sucede en plena guerra civil, escrito por la más joven del grupo, todavía con los sueños intactos. Paula recrea, en suma, una bella historia de amor con visos de leyenda cuya acción transcurre en el mismo valle en el que se encuentran, en el pueblo abandonado que a veces recorren para estirar las piernas entre escombros y ruinas; acaso una nueva metáfora de la labor destructora del tiempo. De hecho, la chica confiesa en un momento dado en que se habla de temores inconfesables: «La falta de sentido; que nada de lo que hagamos acabe sirviendo para nada» (p. 51), y aún Jonás, el protagonista, añade en la p. 71, mientras se ve reflejado en la carrera dudosa de un saxofonista que languidece en una orquesta de pachanga: «La sensación de que cada día es más difícil corregir cualquier mínimo error. La dificultad de continuar creyendo que uno aún sostiene las riendas de su futuro». Esta historia del saxofonista le sirve a Juan Vico para rendirle homenaje a Charlie Parker y, de paso, a «El perseguidor», otra metáfora más de los múltiples desvelos e insatisfacciones a que nos condena la mayoría de afanes que no han llegado a cumplirse. 

Juan Vico ha construido una novela de personajes a partir del recurso básico del diálogo que entablan estos amigos, además de trazar numerosas remisiones entre los episodios y las partes que lo componen, desembocando en un conjunto trabado, casi orgánico. El autor exhibe aquí un indudable manejo de la lengua y de los recursos literarios, sin olvidar la reflexión metaliteraria, al servicio de un argumento dramático; alternándolos con buenas dosis de ironía y sarcasmo. Y mientras nos muestra los sinsabores de un grupo de amigos que se corresponden con los de su propia generación, el autor rinde homenaje a varios géneros artísticos (el cine, el diario, el cuento, el guion cinematográfico, la fotografía o la música). Y claro, a la novela, un género capaz de englobarlos a todos ellos.


* Esta reseña ha sido publicada en el número 425 correspondiente al mes de mayo de la revista literaria Quimera.


770

Autoridad: figura respetable que hace las veces de dechado de virtudes y perfecciones en la materia que la ocupa, en caso de existir tales cosas. Muestra ejemplar de ese conocimiento.


.
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Hermosa vida que pasó y parece
ya no pasar…
Desde este instante, ahondo
sueños en la memoria: se estremece
la eternidad del tiempo allá en el fondo.
Y de repente un remolino crece
que me arrastra sorbido hacia un trasfondo
de sima, donde va, precipitado,
para siempre sumiéndose el pasado.


Jaime Gil de Biedma, "Recuerda"