Hermosas las palabras de la Elphick e igual de hermosas las tuyas, que las continúan. Despiadado e inalcanzable a la vez es el deseo. Pero su ausencia se nos hace insoportable.
. . Hermosa vida que pasó y parece ya no pasar… Desde este instante, ahondo sueños en la memoria: se estremece la eternidad del tiempo allá en el fondo. Y de repente un remolino crece que me arrastra sorbido hacia un trasfondo de sima, donde va, precipitado, para siempre sumiéndose el pasado.
Pero no lo apaga...
ResponderEliminarPor ventura, la imagen se fija y nunca se deja de mirar.
ResponderEliminarEn el entrecejo se acomodan las rayas del tigre.
Abrazo colmado.
Gracias por el epígrafe, Gemma querida.
ResponderEliminarAbrazos
Lilian
Hermosas las palabras de la Elphick e igual de hermosas las tuyas, que las continúan.
ResponderEliminarDespiadado e inalcanzable a la vez es el deseo. Pero su ausencia se nos hace insoportable.
Un abrazo, Gemma.
Y siempre renace y se aviva.
ResponderEliminarBello, sí.
Abrazos flojitos por la calor.
Gracias a todos por vuestros comentarios. Y un abrazo
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