Cielo abajo
...
...Cielo abajo, algunas estrellas apagan sus brillos en frondas verdes y cristalinas de puro aceite. Como un eco maldito, vaga y reverbera para nadie el oleaje de su aciaga memoria.
.....
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Hermosa vida que pasó y parece
ya no pasar…
Desde este instante, ahondo
sueños en la memoria: se estremece
la eternidad del tiempo allá en el fondo.
Y de repente un remolino crece
que me arrastra sorbido hacia un trasfondo
de sima, donde va, precipitado,
para siempre sumiéndose el pasado.
Jaime Gil de Biedma, "Recuerda"
...Cielo abajo, algunas estrellas apagan sus brillos en frondas verdes y cristalinas de puro aceite. Como un eco maldito, vaga y reverbera para nadie el oleaje de su aciaga memoria. 
la foto... el texto...
ResponderEliminarqué impacto a esta hora de la madrugada
un abrazo
La imagen tiene dos dimensiones, pero el texto añade, a la simetría vertical del espejo, el eco de la memoria aciaga. La cuarta dimensión puede ser prefectamente tu propia sensibilidad para captar ese instante. Un abrazo.
ResponderEliminarlos reflejos
ResponderEliminarcrean adicción
como si la realidad invertida
fuese otra cosa
besos bella
Gemma, podríamos decir que es un poema sinfónico.
ResponderEliminarEl mas nitido sentido del impresionismo, Monet, se encuentra aquí, es decir, la busqueda de la luz y la realidad.
Me detengo, para agrandar mi retina al interior del reflejo.
Un abrazo impresionado.
Sergio Astorga
Tu texto es música, pintura y literatura a la vez. Has vuelto a hacer magia. Te aplaudo.
ResponderEliminarUna preciosa y perfecta combinación de texto e imagen.Me ha gustado mucho el uso de diferentes colores en la tipografía.Tu forma de captar el mundo y recrearlo para tus lectores es siempre impactante.Un beso guapa, que da gusto pasearse por tus palabras
ResponderEliminar¡Qué buenas estas breverías líricas tuyas, Gemma!
ResponderEliminarUn abrazo, Javier.
Lara, hay imágenes que dejan asomar cierto desasosiego. Ésa sería una de ellas. Besos
ResponderEliminarPedro, al eco de la imagen quería añadirle el de la obsesión o el recuerdo aciago. Lo viste -como siempre- muy bien. Un fuerte abrazo
Aroílla, la realidad invertida es siempre otra cosa. ;-)
Un beso grande
Sergio, tu valoración impresionista me ha impresionado en correspondencia. Vuestros comentarios-reflejo mejoran mucho lo escrito. Gracias y un beso
PS: La búsqueda de la luz y de la realidad sumergidas... ;-)
Herman, gracias. La musicalidad y el ritmo son al estilo (o a su pretensión) lo que las imágenes y recreaciones a la escritura. Los colores, esta vez, querían señalar los diversos niveles de significación posibles. ;-P
Un abrazo, Javier
Marisa, lo mismo digo. Y muchas gracias. El mundo representado debe ser capaz de impactar (o en su defecto interesar) de algún modo. Besazo
Javier, jaja. A mí me sorprende tu enorme capacidad para titular lo que lees. ;-P
A estos textos brevísimos los he llamado otras veces 'micromegas'.
Abrazos
¡Vaya foto, Gemma! Es impresionante lo bien captado que está el lugar que eligen las estrellas para apagar sus brillos.
ResponderEliminar¿Verdad que parece increíble? Los lugares de extrema belleza tienen un nosequé de irreales siempre. Como si la belleza fuera, en sí misma, una ficción. Un beso, Araceli
ResponderEliminarA ciertas horas nocturnas, si estoy cerca de un lago, recibiré con aprensión cualquier vibración del aire. Porque hay que haber sido muy importante para dejar una memoria infausta.
ResponderEliminarBueno, Nano, nunca está de más precaverse. A veces, la memoria que guarda relación con brillos de estrellas apagadas resulta infausta. Un beso
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