El cuerpo le late descontrolado aunque ella se ha propuesto convertirse en una buena chica, educada y respetable, exhibir en todo momento gestos y maneras propicias, de intachable conducta. Todavía desconoce que hoy hace quince años que sus hormonas se declararon en guerra.
..
mater misericordia.
ResponderEliminar¡Eres buenísima!
¿Quince años ya?
Un requetebeso con hormonas en revolución inversa.
Qué horror, yo ya veo las hormonas de mi hija aprestándose para el combate. Muy sutil y contundente a la vez este micro. Felicidades y un beso.
ResponderEliminarEstà bien esa resoluciôn que ha tomado (convertirse en una buena chica...)una pena lo de las hormonas. Ahora hay excelentes tratamientos para éso (Sonrîo)
ResponderEliminarEstà genial, Mega. Me repito, lo sé, pero es que eres genial escribiendo.
Un besote, guapetona.
Y es que a ver quién para la guerra de las hormonas. Un antídoto, es necesario un antídoto (quizá una foto de Rouco, o de Aznar).
ResponderEliminarNo, dejemos obrar a la naturaleza, que no sabe de monstruos.
Salud y República
A mí ese latido descontrolado me parece pura vida, sin un poco de descontrol todo tiene un reverso de trampa, de cartas marcadas.
ResponderEliminarEstoy con el anterior comentarista: nada de antídotos. Cada cual con su guerra y Dios en la de todos.
No sólo a los quince es duro, no disimulemos:-))))
Buen mayo a todos.
Mega, esta oposición entre los impulsos vitales y las normas sociales esta plateado agudamente.
ResponderEliminarCuando llega la consciencia?
El miedo para algunos y la revelación para otros.
Un abrazo pro cambio.
Sergio Astorga
Las mujeres pasamos la vida lidiando con las hormonas, sufriendo ese descontrol que rige muchos de nuestros actos, ¿te cuento lo de los sofocos?
ResponderEliminarMega,sí hormonas desde que nacemos,son inagotables, lo peor es el dilema moral que puede surgir a esa edad,entre lo natural y lo que dicen que debería ser...menos mal que en algún momento se pasa.Abrazos microhormonales.
ResponderEliminarIzaskun, ya veo que la cosa es un sinvivir... Cuando empieza porque empieza y cuando acaba porque acaba... Y cuando sigue, porque sigue. ;-P
ResponderEliminarAntonio, jaja, pues ése es el panorama. ¡Ánimo y paciencia! y beso de vuelta
Eva, yo también creo que es importante tener buenos propósitos (ji). Abrazo gordo
Rafa, eso mismo creo yo: que no hay antídoto que valga. Y si no, que se lo pregunten a doña Naturaleza. Un abrazo
Olga, tienes razón. ;-P
Buen mayo para ti también.
Sergio, es que ese conflicto es el de la existencia misma, ¿no lo crees tú así? Otro abrazo
Araceli, mejor otro día, que de momento ya tenemos lo nuestro. ;-P
Besote
Bambú, ¿qué se pasa? ¿lo natural o lo que debería ser? (Por suerte o por desgracia, se pasa todo). Beso gordísimo
(pienso si me habré saltado este texto por un tic conductual: el de según qué días hormonales de la mujer con la que vivía me hacía el desaparecido).
ResponderEliminar(Nano, jaja. Un abrazo)
ResponderEliminar