Muy agradecida a Carlos Manzano por invitarme a publicar en su revista Narrativas, número 33, abril-junio, de nuevo cargada de diversa literatura (informes, relatos, entrevistas, reseñas...). La última vez que aparecí en ella lo hice con un micro. En esta ocasión colaboro con un relato (aunque muy breve). Os copio el enlace.
... La verdad, cuando es pura y simple, apenas convence.* * O lo que es igual: sólo nos seducen las apariencias; la versión más edulcorada y atractiva de un hecho; a menudo, su última actualización. Poco importa que sea algo improvisada si resulta coherente u ofrece una regurgitación adecuada del asunto, más o menos fiel. Al cabo, toda apariencia de realidad se habrá impuesto si ha sido capaz de cosechar por sí misma cierto aplomo, el consabido aplauso social. Eso sí: con el fin de que no se malogre, es preciso que mantengamos en lo posible la transpiración y la textura del buen maquillaje, aquel que veamos que aguanta mejor según la ocasión.
. . Hermosa vida que pasó y parece ya no pasar… Desde este instante, ahondo sueños en la memoria: se estremece la eternidad del tiempo allá en el fondo. Y de repente un remolino crece que me arrastra sorbido hacia un trasfondo de sima, donde va, precipitado, para siempre sumiéndose el pasado.