jueves, 15 de enero de 2009

Frases malabares, 5

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I.
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La civilización no suprime la barbarie, la perfecciona.

François-Marie Arouet VOLTAIRE
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No habiéndose podido lograr que lo justo fuese fuerte, hase hecho que lo fuerte sea lo justo.
Blaise PASCAL
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La mentira es una forma de talento.
Emile Michel CIORAN
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La cosa que mejor hacemos desearía nuestra vanidad hacerla pasar por la más difícil. Esto puede explicar el origen de muchas morales.
Friedrich NIETZSCHE
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Un hombre sin virtud no puede morar mucho tiempo en la adversidad, ni tampoco en la felicidad; pero el hombre virtuoso descansa en la virtud, y el hombre sabio la ambiciona.
CONFUCIO
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La astucia, que es parte del ingenio, se usa muchas veces para suplir la escasez de éste.
Giacomo LEOPARDI
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Si uno dice la verdad, puede estar seguro de que tarde o temprano será descubierto.
Oscar WILDE
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II. Y un micro-malabar...

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De pronto, se habían enzarzado en una disputa sin saber cómo:
-La civilización no suprime la mentira, la perfecciona. Y la barbarie, que es parte del ingenio, es una forma de talento -dijo el que parecía algo mayor.
-La cosa que mejor hacemos, muchas veces, desearía nuestra astucia hacerla pasar por la más difícil -adujo el otro, para añadir acto seguido-: No habiéndose podido lograr esto, hase hecho que lo virtuoso descanse en la adversidad.
-La escasez de lo justo puede explicar el origen de muchas morales -volvió a la carga el primero-; que la felicidad sea un hombre sin virtud, fuerte.
-Si uno dice del hombre que fuese fuerte: "Éste no puede morar mucho tiempo en lo justo, ni tampoco en la virtud", será descubierto.
-La vanidad se usa para suplir la verdad.
-Pero, tarde o temprano, el hombre sabio la ambiciona, puede estar seguro -repuso el otro, enojado.

Propuesta de título:
LA VANIDAD SE USA PARA SUPLIR LA VERDAD
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lunes, 12 de enero de 2009

Mutter Courage

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Las ruedas se encallan de continuo en el fango, entre piedras, hierbajos y rastrojos varios, no menos sarmentosos que sus pensamientos. Pero ella no abandona. Sabe que si no escapa hoy, una luz diáfana le estallará en mitad de la frente y ya no habrá noche ni mañana que valga; ni siquiera un pasado inhóspito que maldecir. Así que, sin pensárselo demasiado, ha cargado el carro con un puñado de pertenencias, dejando tras de sí los escasos enseres de valor que le quedaban. De lo contrario, no habría podido, simplemente.
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A las seis de la mañana partía el extraño cortejo. Los perros ladraron sin parar las seis primeras horas de trayecto. Una ristra de seis hijos, dos de ellos ajenos, formaba el séquito. Mudos de espanto iban, olisqueando a cada rato su abandono. Quejosos. Lastimeros.

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jueves, 8 de enero de 2009

Contraéxodo

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..Tras andar jornadas enteras por caminos pedregosos, el hombre más joven cayó en la cuenta de que sólo hallarían acomodo en su tierra si conseguían cercenar aquellos deseos afilados como lanzas.
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martes, 6 de enero de 2009

Naturaleza muerta

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La frente, despejada. Los ojos, entornados. La boca, entreabierta. El cuello, estilizado. El gesto, lascivo. El escote, profundo. Los pechos, firmes. Los hombros, redondeados. Aunque, a decir verdad, ahora se daba cuenta, aquella mujer no tenía ni pechos ni hombros, sino más bien clavículas... perfiladas. El escritor impaciente se convenció de pronto de que si seguía por ese camino plagado de adjetivos disparatados, amén de tópicos y previsibles, no iba a poder erigir en toda la noche un relato mínimamente decente. A no ser que...
-¡Un momento! -imploró de pronto a un público que sabía no menos generoso que exigente-. ¿Qué hace esa zapatilla ahí en medio, colgando de la nada? ¿De veras no se dio cuenta el dueño del negocio, probablemente una mercería con las horas contadas, de que ese zapato de mujer, una sandalia de verano para ser más exactos, no debía de ponerse jamás a la altura de tan respingona nariz? Claro que, tal vez, la verdadera historia se agazapara, en realidad, tras el escaparate grotesco, en el espacio franco de la tienda desnuda con mostrador impoluto, o incluso en la trastienda fría, cuyo misterio creía adivinar a lo lejos, tras la oscuridad impenetrable que parecían enmarcar unas cortinas de encaje que, a buen seguro, fueron tejidas por el pulso firme de su anciana madre... La del tendero, claro.
Cuando concluyese el relato de misterio, ¿o era de intriga?, ya se encargaría de podarlo de tanto adjetivo inútil...

lunes, 5 de enero de 2009

Frases malabares, 4

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I.
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La armonía más dulce es el sonido de la voz de la mujer que se ama.
Jean de LA BRUYÈRE
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Recuerden, caballeros, que estamos peleando por el honor de esta mujer, que es, probablemente, más de lo que ella nunca hizo.
Groucho MARX
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El primer amor es una pequeña locura y una gran curiosidad.
George Bernand SHAW
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Toda la felicidad que la humanidad puede alcanzar está, no en el placer, sino en el descanso del dolor.
John DRYDEN
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II. Y un micro-malabar...
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-Es más de lo que nunca hizo. Recuerden, caballeros, que ella es el primer amor, toda la felicidad que esta humanidad puede alcanzar, la armonía más dulce, el descanso del dolor.
Estamos peleando por el honor de la mujer que, probablemente, se ama. El placer de no está en la pequeña locura y la gran curiosidad que es una mujer, sino en el sonido de una voz...
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Propuesta de título: EVA

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sábado, 3 de enero de 2009

Algo muy serio

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Hoy no sabe quién es esa visita
(su nieta).
Tal vez lo sepa dentro de una hora
pero, luego,
ya no:
hercúlea tarea ésta,
la de querer mantenerse
a flote
con los recuerdos
hundidos.
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Y, entre tanto,
queda el consuelo
de saber que
el dichoso tiempo
seguirá arañándole
el gesto y la memoria
con la pulcritud con que actúa siempre:
de puntillas.
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Noventa y dos años son algo muy serio:
se tiene
ganas de nada,
el rostro
parco en sonrisas.
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Hermosa vida que pasó y parece
ya no pasar…
Desde este instante, ahondo
sueños en la memoria: se estremece
la eternidad del tiempo allá en el fondo.
Y de repente un remolino crece
que me arrastra sorbido hacia un trasfondo
de sima, donde va, precipitado,
para siempre sumiéndose el pasado.


Jaime Gil de Biedma, "Recuerda"