lunes, 27 de noviembre de 2017

Alborada

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Quien está solo, solo de fría soledad, suele dar vueltas y revueltas 
a las cosas cotidianas. Esa clase de penar por una recompensa mil veces aplazada es un vicio solitario que irrumpe en las jornadas de trabajo menos livianas; de forma atropellada casi siempre. Sin consideraciones vanasComo si deseara instalarse en el corazón de su presa para que le escueza su destello de hielo candente. Y hacerse fuerte con sus dentelladas feroces de animal acorralado. Quien está solo, solo de soledad escarchada, suele salir por las noches a tomar salmorejo y salazones (todas delicias salubres) persiguiendo la luz del alba. 
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domingo, 26 de noviembre de 2017

Natación sincronizada

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Siempre que recorro piscinas a nado, hablo contigo en estilo indirecto libre, despiertos los sentidos al relente de unas aguas en apariencia profundas, sumamente quietas sin embargo en esos instantes en que intento prefigurarte; convocar tu abrazo y un beso tuyo a cada brazada, y tu yo en mí en esa tarde de luces turbias y turbios oleajes de destinos anudados. Muy adentro vives ya, como vivirás mañana y pasado mañana. (¡Y cómo nos encanta resucitar en la memoria aquellos momentos de deleite!) El amor, desde luego, lo es; de hecho, a mí me está pareciendo de un tiempo a esta parte un sentimiento de perfección envolvente. Convendrás conmigo en que para enamorarse en serio hay que tener talento dramático, un poco de suerte y capacidad de arrobamiento. Poseer la voluntad firme de ser feliz en el otro; por el otro; gracias al otro. Rendirse a ello con la mayor humildad. ¡Menudo atrevimiento! De modo que eso es lo que hago cada vez que nado: convocarte, mientras acompaso mi respiración al flujo incauto de mi memoria encantada. Estás en mis sueños porque ellos te (a)guardan.
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Quinientos sesenta y seis

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Como figura de pensamiento, la paradoja nos deja exhaustos; rendidos a la evidencia de nuestro sinsentido.
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sábado, 25 de noviembre de 2017

viernes, 24 de noviembre de 2017

jueves, 23 de noviembre de 2017

miércoles, 22 de noviembre de 2017

Quinientos sesenta y dos

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El gusto y el criterio son cualidades subjetivas, aunque puedan constatarse objetivamente.
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domingo, 19 de noviembre de 2017

Quinientos sesenta y uno

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Sobrellevar alguna estrechez, siempre que no sea de miras, ensancha el espíritu.
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sábado, 18 de noviembre de 2017

Quinientos sesenta

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Los sabios humildes ignoran cuánto saben. Los más resabiados, en cambio, olvidan cuanto saben.
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viernes, 17 de noviembre de 2017

martes, 14 de noviembre de 2017

Quinientos cincuenta y ocho

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Un escritor no es más que un lector avezado. 
Aunque tampoco un escritor avezado es más que un lector.
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domingo, 12 de noviembre de 2017

sábado, 11 de noviembre de 2017

Quinientos cincuenta y cuatro

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Una puerta se abre. Me asomo a su interior oscuro. Las tinieblas tienen la extraña costumbre de adoptar la forma huidiza de los deseos.
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viernes, 10 de noviembre de 2017

miércoles, 8 de noviembre de 2017

Quinientos cincuenta y dos

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La voluntad de querer o libre albedrío, también conocida como libre (in)determinación.
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Quinientos cincuenta y uno

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Los sentidos determinan las decisiones que tomamos. Al menos, las importantes.
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lunes, 6 de noviembre de 2017

Almendros en flor

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En sueños, un lienzo cubre buena parte de la pared del dormitorio. Es de gran formato y hechuras pesadas, con pinceladas de trazo grueso. El marco, de madera de roble, da cuenta de su calidad. Cuando despierto, la obra que preside mi estancia ya no existe. Parecía una pintura de mi admirado Casas. O de Rusiñol. Como el hermoso cuadro de los almendros en flor que había en la vivienda  de mis abuelos. Se liquidó cuando murieron. Lo vi colgado del comedor hasta mi primera juventud. Mientras fui niña, nadie me lo alabó jamás ni me reveló siquiera su ilustre procedencia. No hacía falta. Era enigmático. De poderosa belleza. Lo he buscado en catálogos y revistas de arte. Nada. A veces, se me aparece en sueños, retador. De él cuelga para siempre la bendita inocencia de la infancia. 
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Santiago Rusiñol, Masia blanca (Bunyola, Mallorca) 
(1902, Museu Nacional d'Art de Catalunya, Barcelona)
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Hermosa vida que pasó y parece
ya no pasar…
Desde este instante, ahondo
sueños en la memoria: se estremece
la eternidad del tiempo allá en el fondo.
Y de repente un remolino crece
que me arrastra sorbido hacia un trasfondo
de sima, donde va, precipitado,
para siempre sumiéndose el pasado.


Jaime Gil de Biedma, "Recuerda"