. . Hermosa vida que pasó y parece ya no pasar… Desde este instante, ahondo sueños en la memoria: se estremece la eternidad del tiempo allá en el fondo. Y de repente un remolino crece que me arrastra sorbido hacia un trasfondo de sima, donde va, precipitado, para siempre sumiéndose el pasado.
Gemma, esa foto es de Berlin, ¿Verdad?
ResponderEliminarEs que yo he encontrado muchas como esas allí.
Un beso.
De los alrededores de Berlín, sí. De algún pueblecito perdido de los muchos que hay por la marca de Brandenburgo, en la antigua RDA.
ResponderEliminarOtro beso (por cierto).
ResponderEliminarAsí es y más.
ResponderEliminarSaludos.
Accidentado de por vida, la tierra que me circunda es roja como la hormiga.
ResponderEliminarAbrazo lleno.
Gracias, Jorge y Sergio, por vuestros comentarios.
ResponderEliminarAbrazos