...Balcón 1º 2ª: "Los pensamientos devienen cosas".
2º 3ª: "Hechos en lugar de promesas".
Ático 1ª: "¡Toma partido!".
Entresuelo dcha: :-)
Un paseante cualquiera: ¡¡!!
Yo: Click.
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(Y, luego, un pájaro volando: flus-flus-flus.
Y enseguida, un coche: Roouummmmmm.)
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Berlín, 16 de julio del 2009. 18:48 hh.
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No hay duda que al ver la fachada un pensamiento te "devino" cual pajarillo volando. Sacaste la cámara y actuaste. Click click click. Por supuesto, individualmente. Las masificaciones son molestas. Ya sabes, rooouummm roouummm roouummm...
ResponderEliminarUn beso desde el ático.
¡Ah! Y no lo olvides, las cosas esperan acción.
Muy buenas las respuestas tuya, del pájaro y del coche a la invitación de esa fachada parlante, exhortante. Me queda una duda: la sonrisa de abajo es cosa del edificio o es la reacción que se presupone al viandante (interacción). Un beso.
ResponderEliminarAdanero, desde luego que sí. Por cierto, ¿cómo adivinaste que saqué más de una foto (tres exactamente)? ;-P
ResponderEliminarAntonio, yo creo que es la propia casa la que se ríe de su ocurrencia... Pero, sea como fuere, no deja de ser un guiño del edificio-artista al transeúnte.
Otro para ti
Yo también llevo siempre la cámara en le bolso. Siempre son tres fotos. Click, salta automáticamente el flash cuando no debe. Click, se cruza esa señora inoportuna. Click, esta es la definitiva.
ResponderEliminar¿Y si la casa se estuviera riendo de los que la miran?
Un beso desde el entresuelo.
¡Me encanta tu secuencia! ¡Me regusta!¡Me sonríe!
ResponderEliminarUn beso,guapísima.
Jejejejjee, qué divertido encontrarse cosas así, le estimulan a una la creatividad!
ResponderEliminarMega, una casa chic y muy oportuno tu click y por supuesto tomo partido y yo entraba de chaqué, no me preguntes porqué.
ResponderEliminarUn abrazo tutú.
Sergio Astorga
Adanero, no te quepa la menor duda. ;-)
ResponderEliminarUn abrazo para ti
Izaskun, quise transponer la realidad "ficticia" de la casa a la del papel, sin solución de continuidad, para ver qué resultaba de ello. En realidad, la performance ya estaba hecha... Beso
Ecologismo, aparte de que en Berlín sea muy frecuente toparse con mil extravagancias, siempre resulta estimulante observar con ojos nuevos una realidad que todavía no es la tuya (aunque, con el tiempo, termine siéndolo). Saludos cordiales
Sergio, jaja, tranquilo. No te preguntaré por qué. ;-P
Un abrazo yoyó
Desde luego, una casa que sonríe e invita a pensar y a hacer, es para un click (o tres;-).
ResponderEliminarGracias por traérnosla y enhorabuena también por tu participación en "Letras de Chile". Me ha encantado la selección. Creo que el ojo de cristal es uno de mis preferidos.
Besazos y que sigas apropiándote de cosas y casas, Gemma.
Gracias, querida Olga. Yo también lo deseo (seguir apropiándome de cosas y de casas). ;-PP
ResponderEliminarUn beso
Hegeliana secuencia –como corresponde a Berlín, que es donde se quedó la última mirada del filósofo–: la piedra exteriorizándose en palabras y el click de “un paseante cualquiera” –que ni mucho menos es “cualquiera”– perpetuando el fenómeno. Al final, el pájaro corona el razonamiento con su altura –una metáfora del “espíritu absoluto”–. El coche me molesta, supongo que también a Hegel y al “paseante cualquiera”.
ResponderEliminarMe gusta.
Un saludo. Y perdona esta querencia a los burladeros de la filosofía.
Antonio, tú y tu(s) filosofía(s) sóis muy bienvenidos por estos Sueños. Gracias por pasarte y dejar unas palabras.
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