martes, 10 de mayo de 2011

Buenos augurios para un futuro incierto



Y que cuando nos sintamos anclados como un viejo barco inservible, alguien en nuestras vidas sea capaz de vernos con menos cerrazón, brindó el marine momentos antes de lanzar su último ataque, tambaleándose hasta caer rendido, hoy hace de ello 38 años exactos.

*La foto se titula "Puerto pesquero Ayamonte" y procede del blog de Guillermo Méndez, FugaZes.


17 comentarios:

  1. Este microrrelato sencillamente me encanta. Felicidades.

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  2. Curioso que hayas representado un micro de marines con ese barco de Ayamonte, que es de donde soy. Barco que a partir de ahora asociaré a tu historia. Saludos.

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  3. Gemma, los pulmones estan anclados en aire y el azul se oprime en su traje de marino. Los años gotean como presagios.
    Futuros para la mar, eso queremos tener.

    Brindemos.

    Abrazo encallado.
    Sergio Astorga

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  4. Nameit, muchas gracias. Y bienvenida.
    Me gusta saber que compartimos afinidades y amigos.

    Ricardo, pues qué casualidad. La foto procede de un blog del que me alimento a menudo: FugaZes, de Guillermo Méndez. Esta en concreto me gustó sobre todo por el precario equilibrio que guardaba la embarcación. Abrazos

    Lola, hoy la realidad (y hasta las esperanzas) resultan más inciertas que nunca si cabe. Yo también lo creo. Un beso

    Sergio, "los años gotean como presagios"... Algunos son terribles por la enorme carga de predestinación que acarrean... Abrazos a toda vela

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  5. Blogger se ha zampado así, de golpe y porrazo, unos cuantos comentarios. Os los copio por si no regresan...

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  6. ¡Ojalá se cumplieran los buenos augurios en un mundo como el de hoy, tan incierto!

    Buen micro.

    Besos cargados de esperanza.

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  7. Gemma, los pulmones estan anclados en aire y el azul se oprime en su traje de marino. Los años gotean como presagios.
    Futuros para la mar, eso queremos tener.

    Brindemos.

    Abrazo encallado.

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  8. Como nos llevas en el tiempo de un lugar a otro en tan pocos renglones, Gema. Muchas gracias.

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  9. Si hace 38 años, parece que no ha cambiado mucho la cosa.
    Besos, Gemma.

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  10. Hermosas palabras. Y que así sea siempre.
    Excelente.


    Saludos.

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  11. A mí me pasa como a Nameit: sencillamente me encanta. Todo el conjunto el texto y la foto.



    Un abrazo

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  12. Estas palabras tienen un aire épico que sabe a dignidad, un valor que quizá hoy en día no esté muy en alza, pero que nos da oxígeno y nos ilumina.
    Un abrazo

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  13. Qué tristeza, casi se le puede oír respirar como a un enorme animal moribundo.
    Kisses.

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  14. Esteban, tu comentario es muy perspicaz, porque en efecto se trataba de eso mismo: de que el propio marine se viera azotado y zarandeado por los vientos huracanados -e inmisericordes- del tiempo.

    Torcuato, a los marines les venden heroicidades que luego sus vidas no consiguen reflejar. Basta ver la gran cantidad de pelis o series que han hecho sobre el tema de la guerra (las últimas que he visto: 'Hermanos de sangre' y 'El Pacífico') para percatarse de esta verdad, en apariencia tan simple y evidente...

    Tipo, en el caso de la pieza no se cumple, pero es cierto que se trata de un anhelo universal. En el micro la borracherra del marine vendría a ser -de hecho- un anticipo de su anunciado fracaso vital, tan inevitable...

    Rosana, lo celebro. El micro resulta de lo más dramático al sintetizar un deseo de vida con su inmediato fracaso. En mi opinión, se trataría de un incumplimiento anunciado...

    María, lo viste muy bien. En buena medida resulta épico porque contiene coraje y grandes dosis de humanidad, valores muy "raros" hoy en día.

    Olga, en efecto. Debe de ser uno de los micros más tristes que he escrito...

    Besos y abrazos para todos

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  15. Que caiga agotado, pero no rendido; le deseo.

    "hoy hace 38 años" introduce un enigma indescifrable.

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  16. Pues me parece muy bien que así lo veas. Un abrazo fuerte, Nano

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  17. No tengo ninguna experiencia en las cosas de la mar, así en femenino como la llaman los marinos, pero siempre he pensado que debe ser fácil equivocarse a la hora de trazar un rumbo en la inmensidad del océano. Todo esto sobre el asunto de navegar, porque creo que ha habido una confusión sobre la foto del barco en Ayamonte: me hubiera gustado hacerla pero me temo que no es mía y creo que es justo aclararlo, sobre todo pensando en el verdadero autor. Bueno, es obvio que no tiene ninguna importancia, pero ponte como un juego la penitencia de sacarle punta al error y escribir uno de esos estupendos textos que publicas. Besos.

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Hermosa vida que pasó y parece
ya no pasar…
Desde este instante, ahondo
sueños en la memoria: se estremece
la eternidad del tiempo allá en el fondo.
Y de repente un remolino crece
que me arrastra sorbido hacia un trasfondo
de sima, donde va, precipitado,
para siempre sumiéndose el pasado.


Jaime Gil de Biedma, "Recuerda"